Por un lado tenemos una marca notoria que Marcelo Bielsa dejó en varios de sus exdirigidos. Y por otro lado tenemos ese concepto "guardiolista" de robar ideas de los mejores. Ideas y ejercicios de entrenamiento, también. Matías Almeyda lo demostró hace poco.
Atacar. Ir para adelante. Presión alta. Recuperación de la pelota rápido. Transiciones casi imperceptibles... Banfield, el equipo que hasta hace unos meses dirigía Matías Almeyda, gozaba de ser el combinado que más situaciones de gol generaba por partido. Mas allá de la efectividad con la que las concluía, muchos veían en ese rasgo del equipo albiverde la impronta inconfundible del espíritu bielsista. El mismo que el de Azul respiraba en la Selección Nacional, liderada por el rosarino, cada vez que era citado.
Trabajo defensivo
Martí Perarnau es el autor del libro Herr Pep que cuenta los primeros días de Guardiola en el Bayern, Allí narra que el famoso DT expresa "Yo soy un ladrón de ideas, estoy todo el día mirando y observando para ver qué puedo utilizar" Varias veces el catalán lo reafirma -incluso- en las conferencias multitudinarias que lo tienen como orador e incita a los asistentes a tomen lo mejor de lo que vean del trabajo de los demás y lo incorporen para el suyo.
Matías Almeyda parece haber seguido al pie de la letra el consejo de Guardiola. Hace unos años se llevó a cabo en Buenos Aires el Congreso de Fútbol Argentino "Julio Humberto Grondona" organizado por la Asociación de Técnicos del Fútbol Argentino (ATFA), la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y el Club River Plate. En la segunda jornada de ese evento, en horarios de la tarde, el que por entonces era entrenador de Banfield, junto con sus colaboradores, hizo unos trabajos en campo donde además de mostrar cómo organizaban la sesión de entrenamiento, exhibió una serie de ejercicios para las distintas líneas de juego: ataque, mediocampo y defensa.
Los trabajos defensivos fueron muy particulares, ya que se desarrollaban cercanos al área grande y buscaban como objetivos impedir el lanzamiento de centros laterales y obstaculizar el remate frontal del atacante, esto último luego de una conducción hacia el centro del campo por parte del rival.
Casualmente, y gracias al archivo visual que tiene YouTube, me topé hace unos días con unos trabajos defensivos que realizó Marcelo Bielsa en una sesión especial de entrenamiento que realizó únicamente con jugadores que cumplían roles defensivos en los años que dirigía al combinado nacional. Y la similitud es casi idéntica a los realizados por Almeyda aquella tarde lluviosa de noviembre de 2013.
Lo más interesante de la combinación de ambos videos resulta, por lo pronto, no solo la comprobación de la propuesta de trabajo "bielsista" que Almeyda implementaba en su trabajo diario con el equipo del sur del Gran Buenos Aires, sino que -también- es interesante apreciar las indicaciones que ambos conductores impartían en el momento en que se llevaba adelante la tarea planificada. Bielsa aconsejaba a los delanteros que, de acuerdo a su perfil, buscaran el centro con comba hacia afuera (si eran diestros) o el enganche y el remate (si eran zurdos). Mientras que Almeyda se centraba en la corrección corporal para no quedar desairados ante un posible regate del atacante, el uso de los brazos para desestabilizar al contrario en el espacio próximo y la distancia de los pasos en el momento de establecerse la disputa uno vs uno en ese sector de la cancha.
Aquí el video donde se ve la similitud de las tareas y las indicaciones que dan ambos:
Según Eduardo Rojas Rojas, en el libro Los 11 caminos al gol, Bielsa dice que "todos los sectores del campo tienen reglas, y tenemos que proponer situaciones para que vayan siendo ejercitadas y ejecutadas para enseñar a resolverlas" Y si esas situaciones propuestas para ser ejercitadas son innovadoras, o verdaderamente útiles, seguramente se replicarán en algún entrenamiento futuro de cualquier otro entrenador del mundo.
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